Nelson Villalobos posa en su taller, en el centro de Vigo. / Foto MIGUEL NÚÑEZ
Faro de Vigo.Domingo 09 de abril de 2006
NELSON VILLALOBOS “Cada día necesito un sonido”
Apenas lleva tres meses en su nuevo estudio, pero cada rincón rezuma ya el carácter curioso, viajero y creativo de Nelson Villalobos (Cumanayagua, 1958). El pintor cubano dedica cada estancia de un céntrico piso de Vigo a un trabajo diferente: la pintura, la escultura, la fotografía y la biblioteca, que mima con el orden más delicado. "Necesito bastante espacio, porque acumulo cientos de objetos que encuentro y que con el tiempo, a veces años, pasan a formar parte de mis obras, explica. Hierro oxidado, piedras, cables, tablas, herramientas viejas, recortes de revistas... Nelson dota a cada objeto perdido de un nuevo significado. Ahora trabaja en las "islas", originales esculturas que se construyen sobre piedras. Confiesa que le "duele" cambiar de estudio y adaptarse a un nuevo espacio, conseguir sentirlo suyo. Para lograr ese ambiente idóneo, tiene una fiel compañera, la música: jazz, clásica, étnica, flamenca o cubana: "Cada día necesitas un sonido distinto para trabajar". El resto de los sentidos también encuentran cobijo en el taller: el olfato se deleita con el incienso; el gusto, con zumos y picos de pan; y la vista, con las imágenes en las paredes de poetas y pintores a los que admira. Su puerta siempre está abierta a la inspiración: "Cuando estoy en el proceso de gestación de una obra paso muchas horas metido en el estudio; incluso duermo en él. Me olvido del tiempo y me aíslo de todos; nunca abandono el taller si no sé exactamente cómo voy a continuar la obra al día siguiente", confiesa. Nelson se declara un poco "maniático" respecto al orden: "No me gusta que me cambien los materiales de sitio, porque cada pincel tiene su rincón y así no pierdo el tiempo buscándolos".